En los últimos meses se ha destinado un importante esfuerzo al desarrollo de vacunas capaces de evitar, o al menos minimizar el riesgo de contagio del COVID19. Tan solo unas pocas han logrado superar los ensayos clínicos que certifiquen tanto su eficacia como su seguridad. Entre ellas se encuentra la vacuna de la empresa alemana CureVac, que inicio sus ensayos clínicos el pasado 17 de junio.
La empresa ha estado trabajando en el desarrollo de vacunas de ARN mensajero desde hace más de 20 años, siendo con ello una de las empresas biotecnológicas pioneras en ese campo. Por ello, no es de extrañar que la empresa haya optado por esta opción en el desarrollo de su vacuna contra el COVID, lo que le permite emplear la experiencia adquirida durante estos más de 20 años de trayectoria. Esta técnica parece especialmente prometedora en un caso como el del virus SARS-COV-2 a juzgar por los buenos resultados obtenidos hasta el momento por otras vacunas contra el COVID basadas en el ARN mensajero como las de Pfizer o Moderna.

La vacuna de CureVac se encuentra actualmente en la fase III de los ensayos clínicos. Hasta el momento, dichos ensayos se habían realizado en Alemania, Bélgica, Holanda, Mexico, Colombia, Panama y Peru. Esta semana, no obstante, se une Argentina a la lista de países que probarán la nueva vacuna de CureVac. En este sentido, el pasado mes de febrero se notificó que Argentina aportaría al menos 5000 voluntarios al estudio distribuidos y controlados en tres centros médicos diferentes. Pero no fue hasta el pasado lunes, 8 de marzo, que se abrió formalmente el plazo de inscripción a los voluntarios para participar en dicho estudio.
Durante el mes transcurrido desde que se aprobase la inclusión de Argentina en el estudio en fase III, Argentina ha aumentado su compromiso con la empresa CureVac, pues planea encontrar hasta 9000 voluntarios. Además, ha aumentado el numero de centros que intervendrán en el proceso. El hospital Evita Pueblo de Berazategui, coordinador del estudio para Argentina, cuenta con el apoyo de los hospitales provinciales “Ramón Carrillo” y “Vicente López y Planes”, el Instituto de Investigaciones Clínicas Quilmes, el Instituto de Investigaciones Clínicas Mar del Plata, la Corporación Médica San Martín, el Centro de Investigaciones Clínicas Zarate y la Fundación CENIT para la Investigación.
¿Quieres ser voluntario?
No todas las personas pueden participar en el ensayo clínico, pues es necesario cumplir una serie de requisitos. Entre estos se encuentran, por ejemplo, que la persona sea mayor de edad, que no esté bajo tratamiento oncológico o tenga algún tipo de inmunodepresión, que no esté embarazada y que no planee quedarse embarazada en el próximo año.
Además, quedan excluidas del estudio las mujeres en periodo de lactancia.
Si cumples todos los requisitos puedes inscribirte llamando al call center del centro de investigación u hospital que te venga mejor de los anteriormente mencionados, en su pagina web o acudiendo a alguno de los centros.
Por último, es importante notar que, si bien el estudio en fase III implica que puedas recibir la vacuna o, por el contrario, un placebo. Si, durante el transcurso del estudio, se demuestra que la vacuna es tanto eficaz como segura, la empresa contactaría a todos aquellos voluntarios que hayan recibido el placebo para administrarles la vacuna.