En el mundo nos encontramos con muchas versiones de cómo debe ser y cómo se debe vivir cada etapa de una relación. Unas son ciertas, pero otras son totalmente falsas si bien, al final, la mayoría son bien intencionadas. La pregunta que a menudo nos surge es ¿Cuál es el verdadero propósito de una relación de pareja? Si alguna vez te lo preguntaste sigue leyendo, pues aquí te respondemos.

Empecemos por decir que una relación de pareja no es perfecta ni mucho menos. No olvidemos que son dos personas imperfectas tratando de perfeccionarse en las pruebas y, por supuesto, sabiendo vivir los momentos buenos, podríamos decir que hay tres propósitos principales en una relación de pareja:
Primero: reflejar la imagen de Dios. Después que Dios creo la tierra y los animales y después El dijo “hagamos el hombre conforma a nuestra imagen y semejanza, señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias y en toda la tierra, y creo dios al hombre a su imagen, varón y hembra los creo” genesis 1;26-27. Este primer propósito, reflejar la imagen de Dios el unirlos mujer y hombre para reflejar su imagen al mundo, implica que en un mundo corrupto tu pareja pueda ver en tu matrimonio al Dios santo.

Segundo: complementarse el uno al otro… “pero el varón es sin la mujer y la mujer es sin el varón” 1 corintios 11;11, porque una sola persona puede llegar rápido a lograr lo que se proponga, pero dos personas llegan más lejos, logrando así propósitos más grandes y agradables a Dios.
Tercero: Multiplicar un legado de Dios. Una línea de descendientes cristianos, en este caso sus hijos, llevarán un reflejo del carácter de Dios a la siguiente generación. Puede que aún no tengas planes de tener hijos, pero si Él le da un hijo, usted tendrá una maravillosa aventura.

Los planes originales de Dios llaman a que los hogares sean una clase de invernadero, un lugar acogedor en donde los niños crezcan aprendiendo principios morales, valores humanos e integridad. Muchas parejas hoy en día parecen estar criando a sus hijos sin un sentido de orientación y sin ninguna misión en la vida. No le están impartiendo a ellos la importancia de dejar un legado espiritual de vidas cambiadas. No están evaluando sus vidas a la luz de la Gran Comisión de Mateo 28:18-20, en donde Jesucristo nos manda a predicar el evangelio a todas las naciones.
Una de sus tareas es impartir un sentido de orientación y una misión espiritual a sus hijos. Su responsabilidad como pareja es hacer que su hogar sea un lugar en donde sus hijos aprendan lo que significa amar y obedecer a Dios. Su hogar debe ser como un centro de entrenamiento para equipar a sus hijos a ver las necesidades de las personas y el mundo a través de los ojos de Jesucristo. Si los hijos no acogen esta misión espiritual a medida que van creciendo, pueda que vivan toda su vida sin experimentar el privilegio de ser usados por Dios de una manera significativa.
Su matrimonio es mucho más importante de lo que pueda haberse imaginado porque afecta a la reputación de Dios en este planeta. Por eso es esencial que usted escoja a Jesucristo como el edificador de su hogar.