Internet y las redes sociales han revolucionado el mundo para bien y para mal. Han surgido Apps para todo, incluso para buscar pareja. Y, por supuesto, los malhechores no se pierden una. Precisamente, uno de estos malhechores es el israelí Simon Leviev, cuyo nombre de nacimiento es Shimon Yehuda Hayut, que aprovechó la aplicación Tinder para timar a sus citas haciéndose pasar por el "Rey de los Diamantes", un magnate de estas piedras preciosas rodeado de lujos.

Y como todos los malhechores, no surgió de la nada. Comenzó en 2011, a los 18 años, huyendo de su país natal por los múltiples fraudes como, por ejemplo, robar cheques. Cuatro años después, fue detenido en Finlandia por robar a mujeres con la excusa de trabajar en la industria armamentística. Tras tres años en prisión, le expatriaron a Israel donde volvió a escaparse tras cambiar su apellido a Leviev. ¿Y por qué el apellido Leviev? Precisamente para hacerse pasar por Lev Leviev, el verdadero magnate de los diamantes y comenzar su estafa a través de la conocida aplicación de citas Tinder. Y puesto que Internet no tiene fronteras, tampoco las tiene su gran estafa ni la búsqueda de sus víctimas.

Toda esta historia real, que saltó a todos los noticieros en 2019 tras ser arrestado en Grecia y condenado a 15 meses, se ha convertido en un documental que ha sido estrenado por Netflix el 2 de febrero de 2021. Dirigido por la británica Felicity Morris, quien produjo "A los gatos ni tocarlos: un asesino en internet", por la que ganó un premio Emmy, y producida por Sam Starbuck (The Nielsen Tapes, America in Color) y Bart Layton (The Puppet Master: Hunting the Ultimate Conman), cuenta con el testimonio de tres de las mujeres estafadas, entre ellas la primera en caer.
En dicho documental se muestra el modus operandi de este timador, cuya estafa fue piramidal: devolvía a unas víctimas el dinero que le robaba a otras. Pero no se habla solo de pérdidas de dinero, sino también de propiedades. Este individuo era todo un don Juan que, durante días o incluso meses, se ganaba la confianza de sus víctimas, quienes al final aceptaban conocerle en su avión privado, lo que terminaría por convencerlas de su estatus.
A partir de aquí, solo tenía que disimular que le llegaban amenazas o que a su guarda de seguridad le habían dado una paliza de forma que necesitaba dinero y, sus víctimas, sin dudarlo ni un minuto, se lo prestaban. Pero esto no quedaba aquí, cuando el timador no mandaba algo de dinero para fingir ser honrado, mandaba recibos falsos de transferencia para hacer creer que había pagado y que era el banco quien no había hecho su trabajo.
Con todo este documental, que no dejará indiferente a nadie, Netflix pretende dar visibilidad al caso y hacer justicia. ¿Te atreverías a buscar pareja online tras conocer la historia del timador de Tinder? ¡Déjanoslo en los comentarios!