Algunas de las especias más apreciadas son el anís, el clavo de olor, el jengibre, el cardamomo, el cilantro, la nuez moscada, la pimienta, la vainilla y la canela. Estas especias son ampliamente utilizadas en la preparación de galletas, postres, ponche o vino caliente, a los que aportan un sabor y fragancia maravillosos, junto con numerosos beneficios para nuestra salud.
El anís o comino dulce, ya sea el grano entero o molido, proviene de un arbusto que crece en la región Mediterránea. Esta especia se usa mucho en el centro de Europa en la elaboración de dulces típicos. Esta especia no sólo aporta un sabor delicioso a los postres sino que además los hacen más digestivos, ya que tienen propiedades calmantes para el estómago.
El clavo, molido o entero, es típico en los dulces en Centroeuropa, en la preparación del vino caliente, típico en los fríos días de invierno, y del sabroso pan de jengibre. Maravillosamente fragante, el clavo fortalece el estómago y reduce la hinchazón después de comidas copiosas, por lo que es ideal para recuperarnos después de las comidas de la época navideña.
El jengibre se usa sobre todo en galletas o en pan. Es originario de Asia. Es picante y un aliado perfecto en épocas frías, donde nos ayuda gracias a su elevado efecto calorífico.
El cardamomo tiene una fragancia intensa y un sabor aromático dulce y picante. Los antiguos romanos ya lo utilizaban por sus propiedades beneficiosas ante los excesos de alcohol o comidas, ya que ayuda en la digestión y es eficaz contra el mal aliento consecuente del consumo de ajo y alcohol.
El cilantro también se usa mucho en nuestras cocinas. Sus aceites esenciales ayudan contra los calambres de estómago.
La nuez moscada se utiliza mucho molida, siendo el condimento perfecto para tus galletas favoritas.
La pimienta de Jamaica, en polvo o como baya, es ideal con manzanas asadas o en galletas, a las que aporta un maravilloso toque de sabor. Ayuda en la digestión y reduce la hinchazón.
La vainilla, junto al azafrán, tiene efectos positivos en el estado de ánimo, lo que resulta muy adecuado para una época ambivalente como la que nos encontramos.
Finalmente, la especia estrella es posiblemente la canela. Sin ella, la mayoría de galletas y el vino caliente perderían su esencia. Esta especia se saca de la parte interior de la corteza de los árboles perennes. Su cálida fragancia incrementa los niveles de serotonina y favorece el bienestar.
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